Me ha gustado esta reflexión de 'bonillaware' que me llega a través de
una lista de distribución de correo.
Una lección de
7.500 millones de dólares
Si hay un momento en la carrera del gurú “de todo a 100” en el que se
toca fondo es cuando decides que es una buena idea citarte a ti mismo.
Como siempre, espero que seáis indulgentes conmigo, pero Microsoft ME
LO HA PUESTO A HUEVO.
Esta semana, muchos desarrolladores se han visto sorprendidos conla
compra de GitHub por parte de la malvada corporación de Redmond, a
cambio de 7.500 millones de dólares. Sin embargo, esa noticia se
escribió en 2012.
En aquel año, la compañía del octogato recibió una inversión de 100
millones de dólares, sobre la que me dio por filosofar en un texto que
concluía así: “de los que no se sabe nada [en relación a los controles
de versiones distribuidos] es de los gigantes del sector, Microsoft
[..] o IBM. Cuando empiecen a moverse, el mercado temblará. Al
contrario que otros, ellos pueden permitirse llegar tarde sacando el
talonario y comprando empresas”.
Lo que llama la atención, en 2018, es que a alguien le sorprenda. Así
que ¿Podemos aprender alguna lección de esta transacción para que no
nos vuelva a ocurrir?
1. Si el capital riesgo entra en tu empresa, el único fin posible de
la misma es ser vendida o cerrada…
… y eso no tiene por qué ser ni bueno ni malo, es sólo una decisión empresarial.
El negocio del capital riesgo es comprar y vender compañías, no
repartir dividendos. Si decides participar en su juego, tendrás que
conocer y aceptar sus reglas. Puede que inviertan en tu empresa
asumiendo unas valoraciones imposibles de ver en otros sectores, pero
sólo a cambio de una serie de prerrogativas, que trascienden el
porcentaje que estos posean de la compañía. Podrás seguir siendo el
máximo accionista de tu empresa, pero eso no quiere decir que puedas
seguir haciendo lo que te dé la gana.
En 2012, Andreessen Horowitz soltó 100 kilotones para hacerse con
apenas un 13% de GitHub, valorando la compañía en 750 millones cuando
es probable que no facturara más de 25 al año. Facturar, no ganar, que
es algo muy diferente. Disfrutar de ese múltiplo de 30x sobre
facturación, evidentemente, no sale gratis.
En 2015, GitHub levantó otros 250 melones con una valoración de 2.000
millones. El modelo del capital riesgo exige vender las compañías en
las que invierte, multiplicando ostensiblemente el precio de las
mismas, sólo para recuperar la inversión. Esa valoración de 2.000
millones condenaba a GitHub a una salida a bolsa o a ser adquirida por
el reducido grupo de compradores capaces de pagar semejante precio:
Google, Amazon, IBM, Oracle, Apple, Cisco, Facebook, SAP… o Microsoft.
2. Microsoft va a tope de power a por el mercado del desarrollo de software
Una vez que uno pierde la vergüenza y la dignidad autocitándose, ya no
hay freno. Por eso, quiero recuperar también la Bonilista del pasado 8
de octubre de 2017, en la que debatíamos por qué Microsoft molaba (de
nuevo). Al releer ese texto, 8 meses y 7.500 millones después, el
interés de la empresa liderada por Satya Nadella por hacerse con
GitHub parece tener todo el sentido del mundo. Lo que no es tan
evidente es CUÁNTO les interesaba…
Microsoft ha pagado por GitHub un precio que multiplica por 30 las
ventas -no beneficios- anuales de la compañía y supone 267 dólares por
usuario. Por poner en perspectiva ese gigantesco múltiplo, en 2016
pagó 26.000 millones por LinkedIn o, lo que es lo mismo, 7,2 veces su
facturación y 60 dólares por usuario.
Pagar 7.500 millones por algo que sólo genera 130 al año supone asumir
una rentabilidad anual del 1,7% y que tardarás 57 años en recuperar tu
inversión, así que, es evidente que esta no se produjo con un objetivo
financiero sino estratégico.
Es posible que Microsoft pretenda multiplicar los ingresos de GitHub
Enterprise -la versión on-premise del repositorio, que genera la mitad
de sus ingresos- integrándolo en sus engrasadísimos canales de venta,
pero es probable que lo que realmente quiera sea tener un canal
abierto y privilegiado con los 28 millones de desarrolladores que usan
la plataforma. Desarrolladores que, sin embargo, han reaccionado
migrando repositorios en masa a competidores como GitLab. ¿Por qué?
3. Los desarrolladores son el centro de la industria, pero parece que
no entienden cómo funciona
De perdidos al río. No hay dos sin tres, así que, recuperemos un
tercer texto propio que sólo los tarugos más veteranos recordarán. La
paradoja del software y los malditos programadores, que explica por
qué en un mundo donde el software es cada vez más importante, su valor
tiende a ser cero.
La industria está dejando de vender licencias para centrarse en vender
servicios. El acceso a la tecnología se ha democratizado, entre otras
cosas, porque hoy su precio es una fracción de lo que era en el
pasado. Y ha sido la Comunidad Técnica que construye e integra esos
servicios la que lo ha hecho posible. Sin embargo, que muchos de sus
miembros se hayan subido alegremente al carro del #movingtogitlab y
hayan empezado a migrar repositorios a GitLab como si no hubiera
mañana, no dice mucho de la madurez de la misma.
La compañía fundada por Bill Gates se ha ganado a pulso ciertos
prejuicios por parte del ecosistema con los que le está costando
sangre, sudor y lágrimas acabar, pero ¿por qué se migra un repositorio
a GitLab? ¿Para castigar a Microsoft por intentar acabar con el open
source en el pasado? Entonces… ¿Qué motivación tendrán otras empresas
para rectificar y dar el mismo paso? ¿Quizás por desconfianza? ¿De qué
exactamente? ¿De que pueda dañar al software libre? El software open
source alojado en GitHub no es propiedad de Microsoft y nunca lo será
y, en cualquier caso, no deja de ser un repositorio de Git que puede
ser forkeado y replicado.
Quizás algunos teman que, alguien tan malvado como para ser capaz de
lanzar al mundo algo como Explorer 6, no tenga ningún escrúpulo que le
impida copiar el código fuente de su software propietario, pero para
las empresas que DE VERDAD se toman en serio el espionaje industrial,
el problema no es que Microsoft gestione su propiedad intelectual,
sino que lo haga cualquier otro que no sea ella misma. Por eso GitHub
se hinchaba a vender su versión Enterprise, porque muchas compañías
prefieren pagar 2.500 jeroclos de bronce al año por cada equipo de
hasta 10 desarrolladores -unos 21 dólares al mes, en vez de los 9 que
cuesta una cuenta Team- para poder usar GitHub, alojando el código en
sus propios servidores.
No sé cuántos desarrolladores que han migrado sus repos saben
que,hasta ahora, toda la infraestructura de GitLab está montada sobre
Microsoft Azure, aunque bien es cierto que van a migrar todo a Google
Cloud porque están adoptando Kubernetes como sistema de gestión de
contenedores y, según ellos, Google ofrece un mejor rendimiento a
menor precio que otros proveedores de Cloud.
Estoy seguro de que el rendimiento de Kubernetes en Google Cloud es la
razón por la que cambian de proveedor, por supuesto, pero seguro que
el hecho de que Google haya invertido 20 millones en ellos, a través
de su brazo de capital riesgo también ha podido ayudar un poco. Y, con
la aparición del capital riesgo, la historia empieza a parecerse
bastante a una que ya conocemos. Entonces… ¿por qué estamos migrando
repositorios a GitLab? ¿Por qué no montar un Apache Allura o la
versión Community del propio GitLab sobre nuestro propio hierro?
Yo entiendo que, para la mayoría de los técnicos, hablar de negocio no
sólo debe ser aburridísimo sino una auténtica pérdida de tiempo, pero
para mí, que un programador profesional pretenda abstraerse por
completo de cómo funciona el bisnes de la industria de la que forma
parte es igual de sorprendente que encontrar a un arquitecto que te
diga que no sabe ni quiere saber nada del negocio de los constructores
que le contratan o que prefiere ignorar por completo la cotización de
los terrenos sobre los que construye y las leyes con las que se
gestionan.
Por eso -aunque se les menciona continuamente- este texto no es una
reflexión sobre Microsoft, GitHub o GitLab, sino sobre nosotros
mismos. Quizás ha llegado el momento de crecer, de dejar de jugar con
octogatos y pensar que el mundo es un futbolín donde sólo hay buenos y
malos, para entender quién y cómo se paga la fiesta, para dejar de ser
convidados de piedra.
El lun., 4 jun. 2018 a las 17:29, Alfredo Amaya (
El 4 jun 2018, a las 16:19, Carlos Ayala
escribió: Saludos
esta nota la llegué a ver en la noche de ayer en /. y The Verge. Anunciaba que M$ haía adquirido a Github y que lo iba a anunciar hoy, Lunes.
https://news.slashdot.org/story/18/06/01/2034202/microsoft-is-talking-about-...
https://www.bloomberg.com/news/articles/2018-06-03/microsoft-is-said-to-have...
Este enlace inclusive menciona unos updates: https://developers.slashdot.org/story/18/06/03/2042255/microsoft-is-said-to-...
Y que hay peticiones para evitar la compra. =S
¿Qué opinan?
-- Carlos A. -- Para dar de baja la suscripción, mande un mensaje a: opensuse-es+unsubscribe@opensuse.org Para obtener el resto de direcciones-comando, mande un mensaje a: opensuse-es+help@opensuse.org
Pues que para que lo acabe comprando Oracle mejor que lo haga Microsoft.-- Para dar de baja la suscripción, mande un mensaje a: opensuse-es+unsubscribe@opensuse.org Para obtener el resto de direcciones-comando, mande un mensaje a: opensuse-es+help@opensuse.org
-- Saludos, miguel Los agujeros negros son lugares donde dios dividió por cero. Black holes are places where god divided by zero. Steven Wright -- Para dar de baja la suscripción, mande un mensaje a: opensuse-es+unsubscribe@opensuse.org Para obtener el resto de direcciones-comando, mande un mensaje a: opensuse-es+help@opensuse.org