El 2003-10-21 a las 10:41, Alejandro Ortega Paez escribió:
Pues sí, dejémoslo aquí, porque yo no quiero discutir. Recuerda que me recriminaste tú por que no captaste mi ironía. Sé que la ironía es un
Tanto como recriminar... Fué un comentario, o, al menos, esa era mi intención. Tu dijiste una ironía, yo no la pillé (y sigo sin pillarla, por cierto), y te comenté porqué no se me había ocurrido que era una ironía. Y de ahí hemos derivado en esta "discusioncilla académica". Yo pienso, simplemente, que los emoticones son un añadido interesante en el ámbito del lenguaje escrito en los correos electrónicos. Son textos escritos rápidamente, son leídos por mucha gente, y a veces son mal interpretados, en cuanto a su intención: sobre todo porque no son escritos ni leidos por expertos del lenguaje escrito, y porque la manera de pensar del destinatario es desconocida y puede no entender la intención o "tono" de un texto que para el remitente está "clarísimo". Tu piensas que no: bueno, pues como dicen por ahí, estamos de acuerdo en que no estamos de acuerdo, y tan campantes. ¿Ves? Esta vez no he usado emoticones - guiño - bueno, 'pos' casi.
Hala, un abrazo,
-- Vale. Carlos Robinson (que decían los latinos)